30 de junio fue nuestro último día laboral en el colegio, al menos para los profes, no sé el resto del personal, porque según supe se están cambiando los antiguos sistemas de calefacción por mejores y más modernas calderas.
De todas maneras, iniciamos a las 8 de la mañana la jornada. No había actividades programadas para nosotros hoy, a diferencia de ayer por ejemplo, donde tuvimos un taller.
Así que en la sala de profes escuchamos música, echamos bromas y avanzamos en nuestros computadores algo para el próximo semestre. Además trajimos cositas para picar como galletas, papas fritas (de paquete no caseras) ramitas, queques y jugo, entre otras cosillas. Un colega estaba de cumpleaños así que junto con cantarle, lo grabamos bailando y tonteamos un rato además de bailar.
Después decidimos botar las cosas del semestre que ya no nos servirían como pruebas o guías antiguas, además de libros usados y cosas que habíamos estado acumulando.
Había un grato ambiente, de camaradería, y más encima nos depositaron los sueldos así que no podía ser mejor.
Acordamos mañana sábado en la noche reunirnos en la casa de una colega que vive sola para un compartir, beber unas cositas y de ahí lo que salga (pujaré por karaoke, aunque no me pescan mucho con aquello... jé.)
A las 13 hrs me vine a casa, traté de dormir una siestita, pero tenía hambre así que me preparé un puré con salchichas y huevo revuelvo, algo simplecito.
Luego intenté nuevamente mimir por media horita, pero me levanté a las 16:30 para irme al taller literario. El tema de hoy fue el concepto de la "casa". Leímos poesía referida a ese tema y compartimos nuestro concepto de casa o recuerdos etc. Yo conté que me pasa que sueño seguido con mi casa de infancia...
Recién estoy sopesando lo que se viene, y es que mientras trabajo no pienso mucho en las vacaciones, concentro mis energías en el día a día. Ahora que terminé eso y entro al receso de invierno (3 semanas aquí en el sur) recién pienso más y me gusta.
La vida en cada respiro...
PD: He estado consumiendo muchos videos sobre la construcción, historia y fin del Titanic. Me atrae.
Al entregar calificaciones un profesor debe decidir algo importante: ¿Las entregará "por orden" de logro obtenido o al azar?
Creo que todo el mundo respondería lo segundo; más, a veces el orden (por ejemplo de peor a mejor) ayuda a suavizar la tensión, digamos.
Yo me acerco a eso de entregar dependiendo de cada curso, hay unos donde en verdad es mejor el azar y otros donde ayuda eso de "dejar lo mejor para el final"
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No puedo creer que hoy es mi último día laboral para salir de vacaciones de invierno (3 semanas en esta latitud de Chile...)
El invierno ya ha llegado al hemisferio pobre del mundo. Ese donde patéticamente celebramos navidad adornando nuestros árboles de plástico con motivos invernales y "Santa Claus" re abrigados cuando el verano asola diciembre aquí...
En un cierto momento de la noche todos los profes accedimos a salir al patio para tomarnos una foto con nieve, pero apenas salimos alguien propuso una guerra de nieve. Me entusiasmé, pero tácitamente todos procuramos no hacer bolas de nieve muy duras (no es difícil manejar eso para quien nació en estas australes tierras.)
De hecho los bombazos que impactaron mi cuerpito fueron principalmente cosas que caían desde el cielo más que alguien que apuntara horizontalmente. La clave a todo esto para salir bien parado de una guerra de bolas de nieve es moverte constantemente, incluso al agacharse a recoger nieve hay que procurar moverse constantemente, hacer que el atacante deba hacer abrumadoras ;) correcciones a la puntería porque el objetivo está en movimiento, hay que intentar predecir dónde se moverá y... buena suerte con eso.
Nos tomamos fotos y grabamos uno que otro videíto.
El viernes es mi último día laboral, luego estaré algo así como una semanita aquí y parto de vacaciones.
La vida es un flujo, todo se transforma, todo se mueve, pero Youtube insiste en sugerirme videos de barcos antiguos hundidos, sobre todo el Titanic y estoy harto de las quejas de un pasado no mío.
En lo laboral al menos, en el resto de la vida -supongo como a todo blogger y bloggera- pasa de todo, pero como buen capricorniano valoro que ande bien la cosa en el trabajo porque de ahí viene el dinero que permite la salud y por siguiente, la felicidad.
Así es, valoro la estabilidad en salud y financiera. Lo demás va y viene como, olas en un mar que me parece jamás terminará de ser mar, por más titánicos que le mandemos a pelear. Más inútil que intentar vencer al agua y de eso estamos viendo harto en Chile por estos días.
Cada país con sus problemillas. Por mi parte, durante el día me sentiré muy feliz, sólo ayer estuve confundido y ahora escribo sobre ambas cosas, oh las ambigüedades...
un post que ni yo entendí.
A pesar de que no me gusta el mate, creo que con esta canción en una noche nevada como esta me bebería uno feliz. Porque sí, a esta hora, en la isla Tierra del Fuego (lado chileno al menos) está nevando...
Hoy, como cada lunes en la tarde, sostuvimos nuestro consejo de profes. Como que todo el mundo andaba de buen humor.
Algunas colegas les tocó salir de la sala porque había una capacitación online. Igual estuvo productiva la cosa, como que todos andábamos en buena sintonía.
Mañana nos toca desfilar al medio día por motivo del aniversario de la fundación del pueblo hace poco más de 100 años. No me acuerdo si me anoté para desfilar o no... por las dudas me iré más o menos formalito. Por estos días me ando vistiendo de negro.
Es guapo el invierno en Magallanes, al sur de América.
El fin de semana me fui a la ciudad principal porque necesitaba hacer algunas compras importantes para mi nueva casa.
Lamentablemente las cabañas que tradicionalmente arriendo estaban ya reservadas así que tuve que volver a una hostal central que, recordé por qué había dejado de tomarla: tienen su calefacción central programada para encenderse y apagarse automáticamente a ciertas horas y es horrible. Durante el día no, pero a la media noche se apaga hasta las 4am aproximadamente. Supongo pensado en que muchos turistas llegan de noche a dormir, y efectivamente en booking.com tienen muchas quejas de que en la noche el calor era insoportable.
El problema es gente como yo, que necesita "trabajar" por la noche en el compu, cagado de frío. No vuelvo más, prefiero pagar 10 mil pesos más por algo donde YO decida cuándo quiero calor o frío y admito soy del team friolentos.
El viernes llegué de noche, aún estaba encendida la calefacción así que fui rápido a comprar a una botillería cercana. Debía pasar junto a una cancha para skates y bicicletas, de esas con saltos, subidas bajadas, etc. Es de hormigón porque si fuera de madera ya la habría vandalizado o se hubieran robado los maderos... La cosa es que esta cultura de jóvenes adolescentes que pululan en aquel lugar, además de practicar su afición de noche, escuchan música principalmente hip hop, rap y urbana además de beber cervezas o fumar cosas. Varias veces había pasado por ahí de noche y jamás ningún problema.
Hasta el viernes, en que tras salir del negocio de vuelta hacia mi hostal, decidí tomar un camino más "expuesto" digamos a orillas de la avenida, precisamente para evitar la callecita más escondida que colinda con el parque de los muchachos (que igual es grande, medirá sus casi dos cuadras.)
Ensimismado en mis pensamientos caminaba bajo los postes de luz anaranjados, creo que pensaba en lo que ganaba en vida un conocido estanciero regional dueño de tierras, animales y empresas que le permitiendo construirse la inmensa casona que contemplaba a la otra vereda de la avenida, aunque todo su dinero le pudo ayudar a evadir la inevitable muerte... últimamente he vuelto a leer a Baudelaire.
Cuando a mi izquierda veo tres jóvenes con un perro tipo pastor alemán. La bestia apenas me vio, a unos 6 metros se larga a correr, pero sin ladrar el desgraciado. Su vista fija en mí, sus patas y cuerpo dirigidos inequívocamente a toda velocidad a atacarme. En esa fracción de segundo agradecí haber llevado una mochila para meter mi compras porque así, con manos libres pude apurarme en extraer el pequeño gas pimienta que siempre porto de noche, remover el seguro y esperar el ataque inicial. La bestia inexplicablemente en vez de morderme alguna extremidad saltó como queriendo empujarme con sus patas delanteras a la altura de mi pecho (no soy muy alto) mientras aparentemente el dueño lo llamaba, todo ocurrió muy rápido. El infame animal quiso usar mi pecho para impulsarse y llevar su hocico a morder mi cara, pero mi mano derecha ya le estaba suministrando una carga del gas aunque lamentablemente como había más encima viento en contra algo de aquello me llegó también a la cara. Junto a esta maniobra -que funcionó para alejar al bastardo peludo- retrocedí y seguí rápidamente mi camino con mirada desaprobatoria a los pendejos. Cuando ya los había pasado el dueño me pregunta desafiante que si acaso había escupido a su perro. No, le respondí sin dejar de caminar. Una cosa es enfrentarte a un perro, otra es simultáneamente a tres flaites*.
*Flaite en Chile llamamos a los "turros" argentino, o pandillero en general.
Igual mi mano derecha ya había, nuevamente preparado mi armita para la defensa si tocaba; pero por suerte ya estaba frente al semáforo en verde así que crucé rápido hacia la estación de bomberos donde supuse siempre podría refugiarme en caso de necesitarlo. De todos modos, me doy cuenta que el dueño de la creatura algo vio en el aire, pensó que era un escupitajo por suerte, já, espero ese pequeño demonio cuadrúpedo haya lagrimeado bastante. Por eso me cargan los perros, son patudos, toman decisiones sin preguntarte, invaden tu espacio, tu privacidad y atacan de imprevisto.
Un michi jamás te hará eso, o si lo intenta es demasiado pequeño para suponer un peligro por ejemplo en noche por la calle.
Me cago en los perros y la gente de mierda que los saca sin correa o propio control de voz. Juro que no me temblaría la mano en matar a una de esas bestias si me ataca y tengo en mis manos un arma letal.
Hace unas semanas que participo en un taller literario que organiza la biblioteca municipal del pueblo. Excelente iniciativa. Por ahora somos 4 más el profesor, pero el número va creciendo cada viernes.
En la primera sesión a la que asistí se leyó al poeta chileno contemporáneo a Neruda: Vicente Huidobro ("No cantes a la rosa, hazla florecer en el poema...") Y tras darnos una introducción a su poesía y obra, y leer por turnos algún poema al azar y comentarlo; participamos en el divertido ejercicio de "la escritura automática" consistente en "vomitar" lo primero que venga a la mente, sin meditarlo, ordenarlo o racionalizarlo.
En la segunda sesión a la que asistí -ayer- leímos a una escritora chilena que no conocía, Stella Díaz Varín, de la generación del '50, que en su tiempo se codeó algunos de la talla de Alejandro Jodorowsky, Enrique Lafourcade, Jorge Tellier, Pablo Neruda, Nicanor Parra (con quien tuvo un romance) y José Donoso, entre otros.
Lamentablemente, y según constata Wikipedia:
"En 1973, se enfrentó con el golpe militar y la ascensión al poder de Augusto Pinochet; durante este tiempo, la escritora vocifera a favor del Partido Comunista desde su ventana en la Villa Olímpica a la calle y exhibe fotografías del Che Guevara. Su vivienda es allanada y ella misma, detenida y torturada; además, es arrollada por un vehículo que vigilaba su casa. Durante este periodo participa en la SECH como casi todos los escritores de la época."
Lo poco que pudimos conocer de la poesía de esta leonina sonaba melancólica, me gustó.
El profesor me había dado la tarea de traer un libro para compartir y elegí "Las Flores del Mal" de Charles Baudelaire.
Les conté que me había atraído en la universidad debido a su tendencia a hacer poesía de las cosas que otros no se fijaban. Mientras muchos cantan al amor, a la primavera, a la rosa o a la musa, este hacía arte de una sepultura, los gusanos dándose un festín con quien en vida fuera su amada o una carroña en un día de paseo de bosque junto a una compañera.
Además de los alucinógenos, el vino, las prostitutas, a todo ello le cantó el poeta francés, perteneciente a la generación de los llamados "poetas malditos" de mediados del siglo XIX en Europa.
Al azar abrí el libro y procedí a leerles "Una carroña" (1857)
Recuerda, alma, el objeto que esta dulce mañana de verano hemos contemplado: al torcer de un sendero una carroña infame en un cauce lleno de guijas, con las piernas al aire, cual lúbrica mujer, ardiente y sudando venenos, abría descuidada y cínica su vientre lleno todo de emanaciones. Irradiaba sobre esta podredumbre el sol, como para cocerla al punto justo, y devolver el céntuplo a la Naturaleza lo que reunido ella juntaba; y el cielo contemplaba la osamenta soberbia lo mismo que una flor abrirse. Tan fuerte era el hedor que creíste que fueras sobre la hierba a desmayarte. Los insectos zumbaban sobre este vientre pútrido, del que salían negras tropas de larvas, que a lo largo de estos vivos jirones —espeso líquido — fluían. Todo igual- que una ola subía o descendía, o se alzaba burbujeante; diríase que el cuerpo, de un vago soplo hinchado multiplicándose vivía. Prodigaba este mundo una música extraña, cual viento y cual agua corriente, o el grano que en su harnero con movimiento rítmico un cribador mueve y agita. Las formas se borraban y no eran más que un sueño, un bosquejo tardo en llegar, en la tela olvidada, y que acaba el artista únicamente de memoria. Detrás de los roquedos una perra nerviosa como irritada nos miraba, esperando coger nuevamente el pedazo del esqueleto que soltó. —¡Y serás sin embargo igual que esta inmundicia, igual que esta horrible infección, tú, mi pasión y mi ángel, la estrella de mis ojos, y el sol de mi naturaleza! ¡Sí! Así serás, oh reina de las gracias, después de los últimos sacramentos, cuando a enmohecerte vayas bajo hierbas y flores en medio de las osamentas. ¡Entonces, oh mi hermosa, dirás a los gusanos que a besos te devorarán, que he guardado la esencia y la forma divina de mis amores descompuestos!
Confieso que alguna de las participantes quedó un poco atónita porque no conocían la obra de este, mi poeta favorito, jé.
"Una forma bien particular de romanticismo, eh?" espeté. Y ahí se distendió un poco la cosa, una dijo que no le gustaría le dedicaran ese poema riendo, que no era muy romántico que digamos. (Por cierto, el poema es en realidad una alegoría a las relaciones amorosas que van muriendo, él la escribió en contexto de la tumultuosa experiencia que vivió con su amante Jeanne Duval...)
Pasé el libro a mi compañera de al lado para que repitiera el ejercicio de leer algo al azar, le tocó "El vampiro", llegó entonces a manos del profe que más que nada porque nos quedaban sólo 15 minutos de clases decidió no leer y pasar al ejercicio, que esta vez era elegir una foto de entre unas 12 que trajo y escribir algo inspirado por ella. Yo me sentí de inmediato atraído por esta, que tuve la fortuna de encontrar ahora gracias a Google:
Y si bien tuve que dejar la hoja donde escribí porque a fin de año queremos lanzar algún tipo de recopilación de todo lo que salió del taller, le tomé una foto y es así que transcribo lo que improvisé en ese momento:
Tener que aferrarme a esta metralleta,
en vez de abrazar a mis hijos y nietos,
ahora yacen algunos muertos, otros en la guerra, esa nefasta guerra.
¡Que tenga que aferrarme a esta metralleta!
¡Qué clase de vida es esta!
Que deba preocuparme de esta arma,
que cuando apriete el gatillo un alma arrebate y otra abuela o viuda nazca.
¡Qué ciclo de histeria!
Imaginé a la señora pensando en estas cosas, descontenta con el destino que le toca, enojada con el Creador, ida. Ensimismada en el galimatías de la estupidez de la guerra, una guerra que sólo genera dolor y más viudas o madres o abuelas que pierden a sus hijos y nietos. Tal vez nada de eso sea así: y la foto -aparentemente tomada durante la guerra de Kosovo- la refleje en realidad con miedo o fervor patriótico, no lo sé. A pesar de que editaría bastante algunas cosillas de mi escrito, considerando que fue improvisado en 5 minutos de puño y letra en papel, me gustó. Mis compañeras también se lucieron, me encanta este taller.
Hoy llevé guitarra al 5to porque les estoy enseñando una canción sobre las comidas.
No me sabía ninguna así que cambié la letra de una de los Beatles (I saw her standing there) y les gusta.
Además me entero que estos peques de 10 años escuchan Green Day y Nirvana sumado al clásico ya reggetón y música urbana mayoritariamente de moda.
Más, esta chica que había dado unos problemas por no obedecerme la clase anterior (qué cosa más grunge que no obedecer a la autoridad...) me cuenta que su canción favorita es Something in the Way de Nirvana... y ya que está aprendiendo a tocar guitarra me apuré en contarle que Nirvana es de mi época y que aprendí guitarra en parte gracias a sus canciones.
"Esa canción es fácil, te la enseño si quieres"- le dije. Se imaginarán el resto, hasta video para su mamá grabó tocando los dos acordes de ese tema. Yo autoricé el uso del celu porque, hey, que tu hija toque una del Nevermind a los 10 años es algo importante.
Desde hoy las cosas no serán las mismas con mi querido 5to, sumado al peque que se me acercó confesando que es fan de Green Day y el que sabe canciones de Tiro de Gracia (!) por Dios!
Mi post de anoche quedó medio desordenado, pero creo que mi idea era lo potente de que un peque te confidencie que se siente perteneciente a la comunidad LGBT+
Tiene 9 ó 10 años. Es más maduro que el resto, y más encima me dice que soy el primer profesor en saberlo. Sólo sus compañeritos conocen el secreto y lo toman con naturalidad según veo.
Yo le demuestro que también me es natural y en realidad poco importante, valoro a las personas por cómo son conmigo.
Sólo trato de en palabras bien simples y sin crear alarma, recordarle que debe cuidarse en esta vida de su secreto, porque hay mucha locura allá afuera y no son pocos los que acuchillan a estos chicos en una plaza cualquiera una noche por homofobia, como le pasó al joven Daniel Zamudio en Chile hace pocos años, cuyo asesinato a manos de neo nazis dio a luz a la conocida como Ley Zamudio contra la violencia o discriminación de género.
Soy bien crítico con la agenda 2030 y la cultura "woke" imperante, pero otra cosa es intentar proteger o aconsejar lo mejor posible a un peque cuyo crimen es ser diferente.
Me aseguré de decirle que no compartía que se deba "matar" al que es diferente.
Eso es estúpido.
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En el taller literario que empecé a asistir desde el viernes pasado en la biblioteca pública me asignaron como tarea para la próxima clase traer un librito cuyos pasajes podamos leer todos los participantes (4) --incluido el profesor. Elegí uno de Osho, él escribe ese tipo de obras que da lo mismo qué página abras, siempre habrá algo con lo que resonar.
Espero salga todo bien, igual se ha instalado un fuerte pre juicio sobre este autor y muchos califican su literatura de "auto ayuda" y aquello hoy por hoy es visto muchas veces casi en la misma categoría de ser "terraplanista" o "negacionista".
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Estoy enojado porque hace algunas horas en el congreso chileno han decidido que deberemos volver a la obligatoriedad de usar la dañina mascarilla desde este jueves idealmente debido a la supuesta crisis sanitaria que se vive en el país, mucha gente con problemas respiratorios, niños incluidos. El empresario magnate Bill Gates obviamente te dice que su vacuna nada tiene que ver. Es que inhala tu dióxido de carbono que te mejorarás y ayudarás al planeta.
Bah!
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"Too much love" (me parece que originalmente es de un tipo sueco, Zoltán(?) y el tema es de los 80s, pero según YouTube esto es una re-versión de "Get Well Soon."
Tengo fama de ser bueno en eso de guardar secretos.
He escuchado unos potentes, sólo eso puedo contar.
Otros son míos y me los guardo jaja.
Todos tenemos secretos, ¿no?
Y la gente de todas edades sigue acudiendo a mí a depositar los suyos, pues sepan aquí, ahora y siempre que ahí vamos.
Anoche no recuerdo detalles de qué soñé, pero fluía como la vida misma, acuático, guapo, como que si has de caer de un edificio al menos grites que la vida es guapa.
Una pizarra disponible, digo yo
y COMO buen profe, escucho, aprendo y comparto lo que se me permita,
Intensos días, la mudanza me sigue teniendo contento en todo caso. Cada día son pequeños los progresos, mejoras, pero también disgustos.
Hoy instalé exitosamente una cámara de vigilancia que me llegó la semana pasada. Tomé la decisión de comprarla porque esta casita tiene salida a un sector eriazo. Aquello me encanta por la privacidad que me otorga, pero no puedo ignorar que es una oportunidad potencial para ladrones por la noche debido a la protección que brinda la oscuridad, además que está absolutamente expuesta al exterior, no hay jardín ni reja que la proteja, suerte en todo caso que vivo en un pequeño pueblo en una isla, como es de imaginar, la tasa de robos y crímenes acá es casi nula, aun así, mejor prevenir.
La cámara está guapa, sin ser gran cosa (costó menos de 30 dólares en Ali Express) permite observar lo que enfoca desde mi teléfono, hacer zoom, cambiar entre vista nocturna y diurna, tiene calidad HD y puede grabar aunque pagando una cuenta premium en la "nube". Lo consideraré, más que mal el respaldo grabado es el que se puede usar en la corte en caso de, já. Lo malo es que depende de que haya internet inalámbrica disponible, cosa que hay, pero acá en la isla nunca se sabe, la semana pasada por ejemplo Movistar se cayó desde las 15 a las 22 hrs...
Recibí también la visita el viernes de nuevo amigo que hice en el colegio, un profesor de mi edad que llegó a hacer un reemplazo de un mes, poeta y escritor por gusto congeniamos bien porque además es guitarrista y se inició con el metal... así que estuvo en casa compartiendo unas copas (¿hay buen escritor@ que no beba?) y conversando de la vida. Esto hubiera sido imposible en mi casita anterior, tan pequeña...
En cuanto a lo laboral, por cierto, ya entramos en la recta final de clases, con las últimas evaluaciones y temas por cerrar en el colegio. En menos de 20 días más terminaremos y saldré de vacaciones. Mis pasajes están listos y llegaré hasta Santiago a pasar unos días, principalmente compras que necesito hacer y por supuesto, la apertura a compartir con algún(a) blogger amig@ que me resida en la capital. Siempre es un gusto pasarme unos días por la gran metrópoli cuando puedo.
Ayer estaba tan casado tipo 7 de la tarde que decidí darme una siesta, me levantaría unas dos horas más tarde para ir a un cumpleaños de una colega y amiga. Más, desperté a las 4 de la mañana. Apagué luces, bajé la calefacción y volví a mimir hasta hoy. ¡Qué descanso grato!
Soñé eso sí, con que me suicidaba lanzándome desde un alto edificio en Santiago. No me daba cuenta de que estaba muerto porque súbitamente aparecía de lo más bien en mi ciudad natal y todo seguía tranquilo. Sin embargo, me daba cuenta de que la última decisión que recordaba era irme a pasar unos días a la capital. ¿Y cómo es que no recordaba nada más que visitar un edificio? Logré contactar a mi hermana y le preguntaba si acaso ha oído alguna noticia relacionada a mi muerte. En lágrimas me decía que sí y ahí caía en la cuenta. Me dejaba caer en la casa de infancia (donde aún tengo pertenencias) y estaban echando todo en cajas. Se confirmaba.
Me daba pena, pero también me extrañaba el que podía seguir "moviéndome" entre los mortales, siendo visto por ellos y con la posibilidad de interactuar incluso, es más, tenía nuevas habilidades, como volar a voluntad, entre otras que no recuerdo.
Que nadie se asuste en todo caso, tengo toda la intención de aferrarme a esta vida que me encanta, sobre todo más ahora. Tal vez el sueño simplemente representaba el fin de una etapa en mi vida. Después de todo, ando en plena época de cambios importantes, en este caso, de hogar.
Hace unos días hablaba sobre un conflicto, una pelea que debía dar.
Menos mal le di vueltas al asunto, varias noches medité al respecto, ensayé conversaciones, posibles respuestas, diálogos y posibilidades además de cómo abordarlas; y sutilmente pasé de la rabia a la comprensión.
Hoy llegó el momento de conversar, no hubo ataque ni pelea. Expresé mi petición de manera respetuosa y "buena onda", recibí absoluta comprensión y las disculpas acompañado de un "no se volverá a repetir". Me asombró un poco, pero me gustó. Claramente no hubo intención de causarme mal; lo que pasó fue más bien un daño colateral porque el fuego iba dirigido a otro objetivo. Cosas que pasan.
Si hubiera hablado hace días probablemente mis palabras hubieran sido más duras, pero como andaba yo de muy buen humor hoy al medio día pienso era el momento correcto, el timing es importante...
Y es que con esto de estar en esta nueva casita, todo es mejor en tantos aspectos. Ahora más que nunca valido, en todo caso, esa sabiduría oriental ancestral que aconseja que para cambiar el mundo y hacerlo un mejor lugar, primero tener armonía en la propia casa.
¡Qué cansador es cambiarse de casa! sobre todo para alguien con un grado más o menos inicial del síndrome ese de los que acumulan cosillas "que algún día podrían servir..."
El viernes no me apuré mucho en empezar a empacar las cosas, quería disfrutar la "última noche" en esa casita, técnicamente la última en que dormiría ahí.
El sábado había quedado con el señor del camión (Porter) para que venga entre 14 y 15hrs.
Me levanté tipo 10:00 en mi aún sin desarmar camita.
Algo de culpa por no haber adelantado trabajo, sí, pero creo que inconscientemente había ya decidido que no me iba a estresar por tener todo listo antes de esa hora, que haría lo que pueda por despejar bien el living para que podamos sacar la cama y dejar algo para terminar de trasladar el domingo, al fin y al cabo, encontré barato el precio que cobraba el señor y el servicio incluía también su mano de obra así que nada impedía contratarlo también para el día siguiente.
A todo esto, pongámonos en situación: un señor con familia toma su camión (la bencina/petróleo están altos), lo conduce a la casa del cliente un día sábado a las 15:00 hrs. en este caso yo.)
Se baja para acarrear las pesadas partes de una cama de dos plazas con dos colchones, los dos veladores, un par de cajas y unas 6 bolsas gruesas de plástico, del tamaño "alta resistencia" (Heavy duty- que si no las ensucias son reusables, já)
Tras la casi media hora de carga, nos vamos al hogar de destino (a menos de 5 minutos manejando) y descargamos juntos.
Me cobró $15 mil pesos chilenos. Y no pude evitar recordar la pasada sesión con la "facilitadora" de consulta online sobre mis Registros Akáshicos, que duró sólo una hora con ella en la comodidad de su hogar frente a un compu: $30 mil por la hora. Otro astrólogo me cobró $40 mil por interpretar profesionalmente mi carta natal, a distancia vía Meet.
Yo, ignorante de los costos de los fleteros me imaginaba unos $100 a $150 mil...
Apenas cerré la puerta tras pagarle y darnos un apretón de manos, confieso que me sentí abrumado: tantos bultos, maletas, bolsas y cajas llenas de cosas sumado al librero que me traje y los sillones de la casa.
Al menos había un pasillo por el que transitar entre tantas cosas, todo un poco kafkiano, já.
Hoy domingo la historia empezó a cambiar, sin embargo. De partida fui a la "antigua" casa para terminar de embalar ojalá todo lo que faltaba. Logré dejarla un 95% lista. Sólo falta asear todo y entregar las llaves a la dueña, que es la abuelita.
Mi plan es mañana a la salida del trabajo en la tarde (18 hrs) ir a hacer eso. Luego, un amigo que tiene una mítica Chevrolet C-10 funcionando a petróleo me ayudará con las últimas bolsas y bultos para despedirme de esa casita para siempre.
Es bueno decir que no la extrañaré, esta es el doble de grande y no se humedecen las paredes. Sólo me queda un poco más lejos del colegio (7 mins. extra a pie. app)
Como siempre, tras mucho estrés el día asoleado es más potente.
