Ya es hora (hoy nevó en la Patagonia)

Hay una película (About Time) que se trata de un tipo que tiene el don de poder viajar atrás en el tiempo, pero sólo a su historia personal. Puede cambiar algunas cosas y situaciones, aunque con ciertos límites, por ejemplo muertes no puede evitar ni tampoco forzar a alguien que se enamore de él. Me gusta porque lo que el hombre aprende durante la peli es que lo mejor es vivir cada día, cada instante, cada respiro como si fuera el último porque en efecto él sabe cuándo todo se acabará, cuándo alguien morirá, entonces vuelve años atrás y aprovecha a esas personas mientras aún viven, pero con la consciencia de que él viene del futuro y las ve morir entonces las disfruta "a concho".

Todos conocemos a alguien que vivió junto a otra persona y que sólo le valoró tras la muerte o partida. Cuando ya es tarde.

Me acordaba de esta peli a propósito de que hoy en la cena, mientras conversaba con la abuelita que me da pensión en esta casa me contó que fue al médico y éste le informó de ciertos exámenes que salieron mal. Para peor, es exactamente lo mismo de aquello que murió su esposo.
Ella dará la batalla, me contaba que irá a la capital regional para tratarse y agilizar procesos, tiene algunas metas de vida y no está dispuesta a dejarse estar.

Yo la escuchaba, trataba de animarla, le dije que con lo poco que la conozco la veo como una mujer fuerte y que le queda "para rato". Aún así no pude evitar verla derramar unas lágrimas.  Me pidió no comentarlo con sus demás familiares, hará esto sola. Yo le ofrecí ayuda en lo que necesite.


Ahora es la hora de vivir la vida, me repito para mis adentros mientras escribo; con lo que nos haya puesto al frente, hay una razón por la que estamos enfrentando lo que estamos viviendo. Sea bueno o malo.

Justo mañana me toca dirigir el "Buenos Días", que es la ceremonia de "dar unas palabras" típico en colegios salesianos, al inico de la jornada, mientras los niños están formados antes de entrara a sus salas.

Los temas que nos toquen a cada docente están ya diseñados desde el inicio del año. No son personalizados y la verdad es casi como una ruleta.
En lo personal me gusta dar los buenos días al colegio. No sólo porque disfruto hablar frente a público, sino que porque suelo darle un pequeño "giro" a los temas que me tocan.

Por ejemplo la vez anterior (te suele tocar uno o dos buenos días por mes) mi tema era María y el concepto de Madre. No me costó desplegar ideas respecto a lo que siento y pienso sobre aprovechar a nuestras mamás. Y también agradecerles cada día, recuerdo que hasta les recomendé decirles cuán ricas estaban las comidas. Já.

Mañana me toca el pasaje del Génesis donde se habla de la serpiente, la manzana y cómo Adán y Eva comieron de ella. Por suerte la guía orientadora que me pasaron omite hablar del tema del castigo que se les impuso al par y se enfoca en que pase lo que pase,

debemos confiar

confiar,

siempre confiar.

Ellos no confiaron y probaron la manzana y todo bien, soy de los que en mi fuero interno piensa que el Señor de la Biblia siempre supo que la curiosidad les ganaría y por eso dejó la manzana al alcance y permitió que la serpiente se acercara. Todo fue como tenía que ser.

En lo personal me da lo mismo los nombres: Jehová, Jesus, Alá, Dios, El Gran Arquitecto, Jebús, Pachamama, tú ponle el nombre que quieras a esa energía que nos puso acá y que creó todo este universo que vemos. O tal vez el mismo universo se creó así mismo, no importa, sigo sintiendo que todo es como debe ser y sólo nos queda -simples mortales- confiar en que lo que suceda, al menos, nos hará más fuertes.

Y si no nos hace más fuertes también está ok.