Mantengo una silla en la pieza por si alguna vez alguien me visita: nadie me visita

 Mi situación es poco común: arriendo una casita en una ciudad, pero la uso sólo los fines de semana, en días laborales trabajo en una isla al sur de América. Aquí vivo en la casa de una abuelita que me arrienda una cómoda pieza con de todo y hasta baño privado (tv con cable, calefacción, ventana a la calle, salida más o menos independiente y comidas preparadas por ella, comida casera de abuelita de Chiloé💓 love.

El tema es que desde la ciudad me traje una silla extra al comienzo, a parte de la que ella me provee para usar en mi escritorio -sí, también me ofrecen wi fi para trabajar. El punto es que esa silla en principio la traje cuando recién llegué porque al primer lugar donde me vine no había una. Es una de esas plegables metálicas, que de hecho fue un regalo de un buen amigo de infancia que quizá intuyó me sería útil. Lo ha sido casi como un mueble más para poner toallas o chaquetas, más espera algún día que alguien venga, se siente y nos conversemos unas copas, en un universo paralelo.

En este preciso momento la ocupan las toallas de manos y cuerpo que dejo ahí secarse. La abuelita respeta el que yo quiera tenerla y no me la mueve, pero sí admito que un par de veces al año mueve ciertos muebles más grandes y cómodas incluso con todo lo que guardo dentro, eso no me gusta mucho, pero lo hace cuando no estoy entonces llegando no me queda otra que aceptarlo. Los movimientos supongo se deben a que no le gusta que cada año esté todo igual(?) o bien admito que muchas veces soluciona problemas incipientes que ella detecta, como que tal o cual molesta la pasada por aquí o por allá, hacia el baño, etc. Intenta hacer lo mejor y se lo agradezco, las abuelitas a parte de sabias son mágicas.

Procura que no me falte nada y que esté cómodo. Y no me quejo, hubo esa vez en que llegué de la ciudad un domingo y en vez de la camita de 1 plaza inicial había una de dos plazas, se agradece. Poco a poco va mejorando las cosas, pasé de tener en 2019 una tv de 14 pulgadas(!) no me molestó porque ni veo tv, a tener hoy por hoy una de 42" HD con cable, se agradece. Puedo ser feliz con tan poco...

Miércoles podré viajar a la ciudad continental ya que el jueves tengo libre y el viernes 15 han dado descanso ya que el 16 de octubre celebramos el día del profe así que como cae sábado el Ministerio de Educación nos obsequió el viernes libreta. Tomaré la barcaza el miércoles por la noche para pasar algunos días al otro lado del estrecho de Magallanes y verme con amistades y familia; y entregarme al dulce hedonismo claro está, a todos nos gusta la dopamina natural, ¿no?

"Bailar y llorar" - Teleradio Donoso.