Parto por pedir perdón a las hermosas personas que comentan y no respondo mensajes, estáis en mi corazón, agradezco con amor que me comenten, sólo que soy flojo para responder o a veces no estoy a la altura de agregar nada más.
Pensaba hoy en jefaturas que he tenido en mi vida. Me inicié en el mundo laboral remunerado a los 15 años app. y continué en mis años de liceo, trabajando como chico empaque en las cajas de un supermercado donde la que elegía a los postulantes era amiga de mi padre. Disfruté mucho esos veranos trabajando mientras mis amigos se iban a la playa y todo eso. Las jefas siempre me querían y me sentí valorado. Por mi parte quería hacer bien mi trabajo, aprender y apoyar.
Luego en los años universitarios me dediqué al turismo, era guía de city tours principalmente. Me fascinó aquello, pude conocer gente de otras culturas, de otros países y aprender de sus modos distintos de ser. Recomendaré hasta el día de mi muerte una cosa: abrirse a conocer gente de otras culturas.
Ahí tuve todo tipo de jefaturas, las buenas y las malas. Obviamente la vida quiere que aprendas y seas mejor. o que dejes el turismo y te muevas a la pedagogía, já
Tras titularme en la universidad en diciembre de 2000 encontré trabajo rápido y mi directora me caía bien, era una Escorpio con trayectoria como profesora de Lenguaje. Siendo yo humanista la cosa funcionó bien.
Hasta que dejé de hacer bien mi trabajo me aburrí un poco y era hora de pasar al siguiente nivel. Hacer clases en universidad. Ahí tuve jefes distantes en la universidad estatal, uno rara vez llega a estar en las esferas de rectoría en todo caso, era un mero docente a honorarios. Luego probé experiencia en universidad privada, ahí todo partió guapo, hasta que la mano que me daba de comer me mordió a mí já, pero todo eso fue un buen aprendizaje, tras dos años seguí en docencia universitaria, pero para la competencia ¿soy un mercenario? y de pronto se abrió la ventana de la vida de volver a requerir que enseñe a niños peques y acepté encantado. No olvido al amigo que me dio el dato de "oye, necesitan profe en isla Tierra del Fuego, 44 horas".
No sé mucho de mi jefa actual, pero me aventuro a que es de un signo intelectual: ¿Acuario tal vez? tiene presencia, también podría ser Cáncer, pero la percibo más piola, un gran misterio. Como sea, deseo lo mejor para mi actual colegio y lo más importante, que mis estudiantes sean felices.
Me gusta donde estoy, llegar a cargos no es mi meta; prefiero ayudar a hacer subir la rueda, junto a los demás.
Igual estadísticamente podría decir que tienden a repetirse en mi vida jefas mujeres
Debe ser complicado ser docente y jefe a la vez, por otro lado se te nota seguro de lo que quieres y de dónde te sientes bien.
ResponderBorrarEnhorabuena por ti entonces.
Besazo y feliz descanso.
A mis primeros jefes no los conocí apenas. Del primero puedo decir que era un jeta, todo quedar bien con los demás, pero no hacía nada. Las dos últimas, ya en el puesto donde estoy, son muy similares: más que perfeccionistas preocupadas por detalles mínimos que hacen perder tiempo. Creo que el rasgo común a todos es que quieren quedar bien con todo el mundo, no se mojan y perjudican a sus subordinados. No todos los jefes son así, pero ha coincidido que los que tuve sí lo eran.
ResponderBorrarBuen fin de semana!
Por lo que contás, has tenido buenas experiencias con tus trabajos.
ResponderBorrarEs algo bueno.