En Chile se celebra el 16 de octubre.
Generalmente es un día en el que las autoridades decretan suspender actividades académicas en las escuelas para que se pueda hacer un "compartir" (desayuno), alguna ceremonia de parte de estudiantes y sus familias, regalos varios y la posibilidad de que podamos los profes salir un poco antes y por ahí hasta se suspendan las clases de la jornada de la tarde.
Siempre es un día de alegría en el ambiente del establecimiento. Recuerdo cuando trabajaba en otro colegio llevaba ese día un par de bolsas grandes porque me llegaban muchos regalos y tenía que llevármelos de alguna forma, incluidas las tarjetitas de saludo escritas por los niños. Estoy seguro no es igual que celebrar el día del contador, del guardaparque o del abogado. Aquí son pequeñas almitas que se te acercan corriendo en el recreo para darte un abrazo y decirte Feliz Día Mister!
Antes de ayer pensaba que cuando inicié mi carrera hasta por ahí lagrimillas se me escapaban en esta fecha por las muestras de afecto, pero ahora tras 20 años de carrera no tenía la misma significancia, y es que bueno, me pasé casi una década haciendo clases sólo a adultos y jóvenes desde el 2010, en la universidad y en la academia de idiomas vespertina, respectivamente. Tuve claro, por aquí por allá otras temporadas breves en algún colegio, como ejemplo el que funciona al interior de la cárcel y cuyas experiencias narro profusamente en este blog desde mediados de 2017 hasta mediados de 2018, el tema es que si bien notas el sincero afecto y reconocimiento de los estudiantes en este día, una cosa es cómo se celebra en una universidad -donde me llegaban algunos mails institucionales saludándome y por ahí hasta se negociaba una suspensión de clases- y otra muuuuuuuuyy distinta es cómo se celebra en escuelas de primaria...
Y así llegó el miércoles 14, donde nos recomendaron no perdernos el programa televisivo que mi actual escuela transmite por Facebook Live al mediodía porque habrían saludos y sorpresas por el día del profe (se celebró hoy porque de aquí no tenemos contacto oficial hasta el próximo lunes que es cuando tenemos consejo en la mañana.)
Me conecté y claro, primero fue una entrevista al sostenedor uno de los socios digamos dueños del colegio quien nos saludó, destacó su satisfacción con nuestra labor y contó algunas anécdotas que le marcaron relacionadas a maestros durante su infancia.
Luego fue una hermosa ola de saludos que nadie se esperaba yo creo: salen de repente cápsulas de nuestros familiares enviándonos saludos y reconocimientos en video. A mí me salieron mi hermana mayor junto a mi padre, en otro mi hermano que vive en una ciudad más al norte, y que no veo hace un par de años, y mi ex gatita Canela, a quien mi hermana filmó mientras decía cosas como "yo también quería saludarte..." jaja. Me encantó!
Y así salieron los padres de todos nuestros colegas o parejas, hij@s, etc.
Muchas sensaciones. En estos raros tiempos no temo declarar que fue quizá uno de los más hermosos días del profesor en años... y este viernes se viene una "segunda patita" .
Qué emocionante, no? Al final vamos buscándonos la vida para seguir celebrando, para acercarnos un poco a los demás aunque sea solo en la mente.
ResponderBorrarUn abrazo.